¿Primavera?, no , estamos en Diciembre, pero casi nada
lo indica .
Amanece en Panticosa y las condiciones de la montaña nos trasladan al principio de una primavera de mañanas frías, sin embargo, el otoño se acerca a su final, mañana comienza el invierno y las montañas ofrecen una calidad de nieve en altura apta para un alpinismo de placer, si uno se lo gana.
Amanece en Panticosa y las condiciones de la montaña nos trasladan al principio de una primavera de mañanas frías, sin embargo, el otoño se acerca a su final, mañana comienza el invierno y las montañas ofrecen una calidad de nieve en altura apta para un alpinismo de placer, si uno se lo gana.
La nieve, de alta calidad para crampones está muy,
muy, muy lejana.
Nieve dura, cartón bajo las puntas en todas las vertientes, a la subida.
A la bajada, costra en las laderas NW o pegajosa a las SE por lo que descendemos por el camino del nuevo refugio de los lagos de Panticosa.
El pico Serrato sobre el Ibón de Xuans está magnifico. La aproximación es larga, pero el espectáculo se lo merece. La vista desde la cumbre nos ofrece la vertiente oeste del Vignemale, la cara norte del Taillon y el corredor de Swan entre los dos Astazu .
El pico Serrato sobre el Ibón de Xuans está magnifico. La aproximación es larga, pero el espectáculo se lo merece. La vista desde la cumbre nos ofrece la vertiente oeste del Vignemale, la cara norte del Taillon y el corredor de Swan entre los dos Astazu .
Los corredores sencillos presentan la nieve trasformada y la temperatura fría del amanecer nos permiten la subida .
Las aristas se presentan mixtas pero accesibles con cuidado.
Desempolvar los crampones y los piolets,
deslizarse entre los corredores fríos, en penumbra y salir a las aristas luminosas,
es un placer que libera la mente tras el largo verano.
Antes de las grandes nevadas, algunos años, el Pirineo nos regala con unos días de alpinismo de placer que nos traslada a las rutas más agradables de los Alpes en verano, esto no se paga con nada.
Antes de las grandes nevadas, algunos años, el Pirineo nos regala con unos días de alpinismo de placer que nos traslada a las rutas más agradables de los Alpes en verano, esto no se paga con nada.
Pronto llegará la nieve profunda, a veces
desasido y nos trasformaremos en cazadores de laderas de nieve
polvo para nuestras tablas.
El corredor esta cubierto de nieve dura de fácil cramponaje , el descenso por la vertiente opuesta algo expuesto, nos deposita en el collado.
Tiempo total 8.30h
Salida del corredor |
Arista del Serrato |
Descenso del Serrato |
Vignemale al fondo |
Los Infiernos y El Garmo al otro lado |